Amar al prójimo, odiar al enemigo
Pastor Augusto Ramírez, 8 de febrero de 2015
Nosotros amamos a unos sí y otros no, pero el Señor Jesucristo muestra que se debe amar a todos, incluso al enemigo. Eso sí que es difícil de hacer; el estándar de Jesucristo, que en realidad es el mismo que ya estaba en el Antiguo Testamento, es muy alto, y nos revela cómo somos de injustos y que no merecemos algo del Señor.
La primera parte de la afirmación, amar el prójimo, es clara en las Escrituras, aunque no es solo amar, sino que hay que hacerlo como a nosotros mismos. Ahora, ¿de dónde sacaron los judíos que se debía odiar al enemigo? En la Biblia parecen existir algunos pasajes que promueven el odio, pero se mostrará cómo entenderlos.
Durante el sermón se contestará a preguntas tan interesantes como: ¿es adecuado sentir ira cuando nos ofenden? ¿Es adecuado sentir ira cuando ofenden a Dios? Se adelanta que nuestro deber es amar, y no tomar represalias. Debemos pedir porque aun nuestros enemigos se arrepientan y se salven.
Pasaje central: Mateo 5:43-48 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
43 Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo. 44 Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; 45 para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos. 46 Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo los publicanos? 47 Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No hacen también así los gentiles? 48 Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.