¿Por quiénes murió Cristo? Tratar este tema fue el propósito de John Owen en Inglaterra en el siglo diecisiete cuando escribió su libro en inglés The Death of Death in the Death of Christ (La muerte de la muerte mediante la muerte de Cristo). Es una obra polémica para mostrar entre otras cosas que la doctrina de la redención universal no está de acuerdo con las Escrituras y en realidad destruye el evangelio.
Habrá muchos, por lo tanto, para quienes la obra no tendrá ningún atractivo. Aquellos que no ven la necesidad de la precisión doctrinal y que no tienen tiempo para los debates teológicos que ponen de relieve las divisiones entre los llamados "evangélicos", lamentarán la existencia de tal obra.
Algunos, oyendo la tesis de Owen, se resistirán a leer el libro. Es que el prejuicio es sumamente apasionado y de nuestras tradiciones teológicas sentimos mucho orgullo. Pero muchos, ojalá, sean lectores de otro espíritu. Hay señales hoy por hoy de un nuevo amanecer de interés en la teología de la Biblia. Vemos una nueva disposición para probar las tradiciones, para escudriñar las Escrituras, y para reflexionar sobre la fe.
Es para aquellos de esta disposición que Owen ofreció su tratado. A nosotros nos ayudará en una de las tareas más urgentes que enfrenta la cristiandad evangélica actualmente - la recuperación del evangelio. Dicha afirmación producirá, quizás, una reacción de sorpresa, pero parece ser justificada por los hechos.