La preocupación es incompatible con la fe - 3
Pastor Augusto Ramírez, 27 de marzo de 2016
El plan de vida para muchos jóvenes es posicionarse laboralmente, y en general tener dinero, porque eso les da seguridad y prestigio, pero eso también trae males al creyente. Nos convertimos en materialistas cuando nos preocupamos por las posesiones, y cuando, por tanto, no nos preocupamos por el reino de Dios.
En su lugar, el Señor Jesucristo, nos muestra que si Dios es nuestro Padre, no hay que desconfiar, porque si dio lo más difícil, una vida eterna a Su lado, cuanto más proveerá para las cosas básicas de esta vida. Otro argumento, es que si recibimos la fe, entonces no debe haber preocupación, como les decía a sus discípulos.
El reto es, así, llegar a una fe más profunda, para que la preocupación no nos afecte. Ahora, aunque estamos llamados a que no nos preocuparnos, eso no significa que no tendremos aflicción. A lo cual debemos decir, confiad, Cristo ha vencido al mundo. Tengamos en cuenta que las cosas pasan, pero por providencia del Señor.
Pasaje central: Mateo 6:25-34 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
25 Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido? 26 Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas? 27 ¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo? 28 Y por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; 29 pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos. 30 Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe? 31 No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos? 32 Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. 33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
34 Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.