• 613 1524
  • 311 279 0577
  • Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Usted necesita tener Javascript activado para poder verla.

El reproductor requiere que JavaScript esté activado.

 

Creciendo en fe

Pastor Joel Zartman, 28 de agosto de 2011

 

La vida de Abraham fue una vida de pruebas que hasta el fin siguieron. ¿Pero qué cambió? Que él pudo responder cada día mejor y mejor. Así es la vida cristiana, las pruebas no se acaban, pero crecemos en nuestra fe, en la habilidad de aguantar y responder bien como Dios quiere.

 

John Owen y su contexto

Tertulia Teológica

Episodio 001

Director: Pastor Helberth Conde

Invitado: Joel Zartman

Y edificó allí David un altar a Jehová, en el que ofreció holocaustos y ofrendas de paz, e invocó a Jehová, quien le respondió por fuego desde los cielos en el altar del holocausto. Entonces Jehová habló al ángel, y éste volvió su espada a la vaina.” 1 Crónicas 21:26-27

La historia del censo de Israel es una en donde se mira con claridad la soberanía de Dios (2 Sm. 24) y la responsabilidad de las criaturas (1 Cr. 21). Pero de este pecado cometido por David, quisiera resaltar que no bastó que el rey reconociera su culpa, que se arrepintiera; fue absolutamente necesario que animales puros y sin defecto, figuras de Cristo, fueran sacrificados para calmar la ira justa de Dios y de esta manera cesar la mortandad.

Así, no basta con solo reconocer nuestro pecado. Si en nuestro arrepentimiento no colocamos totalmente nuestra confianza de reconciliación en el único sacrificio que nos libra de la ira justa de Dios, en Jesús, el Cordero perfecto quien con los pecados de su pueblo fue sacrificado en una cruz, para que ellos fuesen libres de la ira eterna de Dios, el pecado no es perdonado y la ira permanece.

- ♦ -

...la sangre de Jesucristo nos limpia de todo pecado.” 1 Juan 1:7

Ningún ser humano puede, mediante obras, ritos, sacramentos, religiones o invocación de seres creados encontrar la limpieza de su conciencia de todos los pecados que ha cometido desde que fue engendrado, ni los que cometerá hasta su momento de morir. Solo existe una fuente, ¡la sangre de Jesucristo derramada en la cruz del calvario!

Todos los que hoy están en la presencia de Cristo y los que estarán, fueron lavados por Dios en esa preciosa fuente. Sus conciencias fueron limpiadas de las obras muertas para poder servir al Dios vivo. En esta fuente fueron lavados los deshonestos publicanos Mateo y Zaqueo, la prostituta que le lavó los pies a Jesús con sus lágrimas y se los secó con sus cabellos, en esa sangre fue lavado el reo que estaba muriendo al lado del Señor en el momento en que le dijo: “Señor acuérdate de mí cuando vengas en tu reino” y por ello el Señor le dijo: “Hoy estarás conmigo en el paraíso.” En esa preciosa fuente fue lavado un hombre que abiertamente odiaba con todas sus fuerzas a Jesús, Saulo de Tarso, el cual después dijo: “palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero.”

Sí, si por la gracia de Dios, confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos con su sangre de toda maldad. Si las peores personas al ir a Jesús con su multitud de pecados fueron recibidas, perdonadas, limpiadas y mudadas en unas nuevas criaturas, ¿qué esperas que no vas a Él? No resistas más, Él te dice: “Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta; si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana.” Isaías 1:18

 

- ♦ -

Y Micaías respondió: Vive Jehová, que lo que Jehová me hablare, eso diré.
Y el rey de Israel dijo a Josafat: ¿No te lo había dicho? Ninguna cosa buena profetizará él acerca de mí, sino solamente el mal.” 1 Reyes 22:14,18

Los que como el rey de Israel, que son orgullosos, arrogantes, tercos, que rinden culto a seres creados, practican la brujería, o que en general viven conforme a los deseos de la carne y no a la Palabra de Dios, rechazando su gracia, gustan de maestros que les anuncien mensajes positivos sobre su salud, prosperidad económica, triunfo frente a sus enemigos, pero detestan a aquellos que como Micaías les hablan lo que Dios dice: que el que siembra para la carne, segará corrupción.

 

- ♦ -

Si pecare el hombre contra el hombre, los jueces le juzgarán; mas si alguno pecare contra Jehová, ¿quién rogará por él? Pero ellos no oyeron la voz de su padre, porque Jehová había resuelto hacerlos morir.” 1 Samuel 2:25

Aquí se está hablando de los hijos de Elí, quienes menospreciaban las ofrendas de Dios, los sacrificios, figuras de Cristo, y se habían entregado al degenero sexual.

Con esta historia aprendemos que cuando alguien ya definitivamente no quiere oir las reprensiones, es porque Dios mismo le ha endurecido el corazón para condenación. Terrible noticia, pero cierta. Dios no puede ser burlado.

Que el Señor sea glorificado.

 

- ♦ -

1. De las Sagradas Escrituras

1. Las Sagradas Escrituras constituyen la única regla suficiente, segura e infalible de todo conocimiento, fe y obediencia salvadores. 1 Aunque la luz de la naturaleza y las obras de la creación y de la providencia manifiestan de tal manera la bondad, sabiduría y poder de Dios que dejan a los hombres sin excusa, 2 no obstante, no son suficientes para dar el conocimiento de Dios y de su voluntad que es necesario para la salvación. 3 Por lo tanto, agradó al Señor, en distintas épocas y de diversas maneras, revelarse a sí mismo y declarar su voluntad a su iglesia; 4 y posteriormente, para preservar y propagar mejor la verdad y para un establecimiento y consuelo más seguros de la iglesia contra la corrupción de la carne y la malicia de Satanás y del mundo, le agradó poner por escrito esa revelación en su totalidad, lo cual hace a las Santas Escrituras muy necesarias, 5 habiendo cesado ya las maneras anteriores por las cuales Dios revelaba su voluntad a su pueblo. 6

1. 2 Ti. 3:15-17; Is. 8:20; Lc. 16:29,31; Ef. 2:20.
2. Ro. 1:19-21,32; Ro. 2:12a,14,15; Sal. 19:1-3.
3. Sal. 19:1-3 con vv. 7-11; Ro. 1:19-21; 2:12a,14,15 con 1:16,17 y 3:21.
4. He. 1:1,2a.
5. Pr. 22:19-21; Lc. 1:1-4; 2 P. 1:12-15; 3:1; Dt. 17:18ss.; 31:9ss., 19ss.; 1 Co. 15:1;2 Ts. 2:1,2,15; 3:17; Ro. 1:8-15; Gá. 4:20; 6:11; 1 Ti. 3:14ss.; Ap. 1:9,19; 2:1,etc.; Ro. 15:4; 2 P. 1:19-21.
6. He. 1:1,2a; Hch. 1:21,22; 1 Co. 9:1; 15:7,8; Ef. 2:20

2. Bajo el nombre de Sagradas Escrituras o Palabra de Dios escrita, están incluidos todos los libros del Antiguo y Nuevo Testamento, que son:

Antiguo Testamento

Génesis
Éxodo
Levítico
Números
Deuteronomio
Josué
Jueces
Rut
1 Samuel
2 Samuel
1 Reyes
2 Reyes
1 Crónicas
2 Crónicas
Esdras
Nehemías
Ester
Job
Salmos
Proverbios
Eclesiastés
Cantar de los Cantares
Isaías
Jeremías
Lamentaciones
Ezequiel
Daniel
Oseas
Joel
Amós
Abdías
Jonás
Miqueas
Nahúm
Habacuc
Sofonías
Hageo
Zacarías
Malaquías

 

Nuevo Testamento
Mateo
Marcos
Lucas
Juan
Hechos de los Apóstoles
Romanos
1 Corintios
2 Corintios
Gálatas
Efesios
Filipenses
Colosenses
1 Tesalonicenses
2 Tesalonicenses
1 Timoteo
2 Timoteo
Tito
Filemón
Hebreos
Santiago
1 Pedro
2 Pedro
1 Juan
2 Juan
3 Juan
Judas
Apocalipsis

 

Todos ellos fueron dados por inspiración de Dios para ser la regla de fe y de vida 1.

1. 2 Ti. 3:16 con 1 Ti. 5:17,18; 2 P. 3:16.

3. Los libros comúnmente llamados Apócrifos, no siendo de inspiración divina, no forman parte del canon o regla de la Escritura y, por lo tanto, no tienen autoridad para la iglesia de Dios, ni deben aceptarse ni usarse excepto de la misma manera que otros escritos humanos. 1

1. Lc. 24:27,44; Ro. 3:2.

4. La autoridad de las Sagradas Escrituras, por la que debe ser creída, no depende del testimonio de ningún hombre o iglesia, 1 sino enteramente de Dios (quien es la verdad misma), el autor de ella; por lo tanto, debe ser recibida porque es la Palabra de Dios. 2

1. Lc. 16:27-31; Gá. 1:8,9; Ef. 2:20.
2. 2 Ti. 3:15; Ro. 1:2; 3:2; Hch. 2:16; 4:25; Mt. 13:35; Ro. 9:17; Gá. 3:8; Ro. 15:4; 1 Co. 10:11; Mt. 22:32; Lc. 16:17; Mt. 22:41ss; Jn. 10:35; Gá. 3:16; Hch. 1:16; 2:24ss; 13:34,35; Jn. 19:34-36; 19:24; Lc. 22:37; Mt. 26:54; Jn. 13:18; 2 Ti. 3:16; 2 P. 1:19-21; Mt. 5:17,18; 4:1-11.

5. El testimonio de la iglesia de Dios puede movernos e inducirnos a tener una alta y reverente estima por las Sagradas Escrituras; 1 y el carácter celestial del contenido, la eficacia de la doctrina, la majestad del estilo, la armonía de todas las partes, el fin que se propone alcanzar en todo su conjunto (que es el de dar toda la gloria a Dios), la revelación completa que dan del único camino de salvación para el hombre, y muchas otras excelencias incomparables y la totalidad de perfecciones de las mismas, son argumentos por los cuales dan abundante evidencia de ser la Palabra de Dios. 2 Sin embargo, nuestra plena persuasión y certeza de su verdad infalible y su autoridad divina provienen de la obra interna del Espíritu Santo, quien da testimonio en nuestros corazones por medio de la Palabra y con ella. 3


1. 2 Ti. 3:14,15.
2. Jer. 23:28,29; Lc. 16:27-31; Jn. 6:63; 1 P. 1:23-25; He. 4:12,13; Dt. 31:11-13; Jn. 20:31; Gá. 1:8,9; Mr. 16:15,16.
3. Mt. 16:17; 1 Co. 2:14ss.; Jn. 3:3; 1 Co. 2:4,5; 1 Ts. 1:5,6; 1 Jn. 2:20,21, con v. 27.

6. Todo el consejo de Dios tocante a todas las cosas necesarias para su propia gloria, la salvación del hombre, la fe y la vida, está expresamente expuesto o necesariamente contenido en las Sagradas Escrituras; a las cuales nada, en ningún momento, ha de añadirse, ni por nueva revelación del Espíritu ni por las tradiciones de los hombres. 1 Sin embargo, reconocemos que la iluminación interna del Espíritu de Dios es necesaria para un entendimiento salvador de las cosas reveladas en la Palabra, 2 y que hay algunas circunstancias tocantes a la adoración de Dios y al gobierno de la Iglesia, comunes a las acciones y sociedades humanas, que han de determinarse conforme a la luz de la naturaleza y de la prudencia cristiana, según las normas generales de la Palabra, que han de guardarse siempre. 3

1. 2 Ti. 3:15-17; Dt. 4:2; Hch. 20:20,27; Sal. 19:7; 119:6,9,104,128.
2. Jn. 6:45; 1 Co. 2:9-14.
3. 1 Co. 14:26,40.

7. No todas las cosas contenidas en las Escrituras son igualmente claras en sí mismas 1 ni son igualmente claras para todos; 2 sin embargo, las cosas que son necesarias saber, creer y guardar para salvación, se proponen y exponen tan claramente en uno u otro lugar de las Escrituras que no sólo los eruditos, sino los que no lo son, pueden adquirir un entendimiento suficiente de tales cosas por el uso adecuado de los medios ordinarios. 3


1. 2 P. 3:16.
2. 2 Ti. 3:15-17.
3. 2 Ti. 3:14-17; Sal. 19:7-8; 119:105; 2 P. 1:19; Pr. 6:22,23; Dt. 30:11-14.

8. El Antiguo Testamento en hebreo (que era el idioma del pueblo de Dios en la antigüedad), 1 y el Nuevo Testamento en griego (que en el tiempo en que fue escrito era el idioma más generalmente conocido entre las naciones), siendo inspirados inmediatamente por Dios y mantenidos puros a lo largo de todos los tiempos por su especial cuidado y providencia, son, por lo tanto, auténticos; 2 de tal forma que, en toda controversia religiosa, la iglesia debe recurrir a ellos como autoridad determinante. 3 Pero debido a que estos idiomas originales no son conocidos por todo el pueblo de Dios, que tiene derecho a las Escrituras e interés en las mismas, y se le manda leerlas y escudriñarlas 4 en el temor de Dios, han de traducirse a la lengua común de toda nación a la que sean llevadas, 5 para que morando abundantemente la Palabra de Dios en todos, puedan adorarle de manera aceptable y para que, por la paciencia y consolación de las Escrituras, tengan esperanza. 6

1. Ro. 3:2.
2. Mt. 5:18.
3. Is. 8:20; Hch. 15:15; 2 Ti. 3:16,17; Jn. 10:34-36.
4. Dt. 17:18-20; Pr. 2:1-5; 8:34; Jn. 5:39,46.
5. 1 Co. 14:6,9,11,12,24,28.
6. Col. 3:16; Ro. 15:4.

9. La regla infalible de interpretación de las Escrituras la constituyen las propias Escrituras; y, por consiguiente, cuando surge una duda respecto al verdadero y pleno sentido de cualquier pasaje bíblico (que no es múltiple, sino único), éste se debe buscar en otros pasajes que se expresen con más claridad. 1

1. Is. 8:20; Jn. 10:34-36; Hch. 15:15,16.

10. El juez supremo, por el que deben decidirse todas las controversias religiosas, y por el que deben examinarse todos los decretos de concilios, las opiniones de autores antiguos, las doctrinas de hombres y espíritus particulares, y cuya sentencia debemos acatar, no puede ser otro sino las Sagradas Escrituras entregadas por el Espíritu. A dichas Escrituras así entregadas, se reduce nuestra fe en definitiva. 1

1. Mt. 22:29,31,32; Ef. 2:20; Hch. 28:23-25


 

 

Moldeando el carácter de nuestros hijos 

1. Los niños necesitan desesperadamenteo ser moldeados


Subcategorías

EscuelaDominicalB

Los estudios realizados durante la escuela dominical buscan fortalecer el conocimiento de Las Escrituras de los asistentes, y por sobre todo se quiere presentar a Cristo como el único salvador para el pecador. A diferencia del sermón principal, se permite la participación de los asistentes, con preguntas o comentarios (Foto: Pamela P. Stroud/Flickr)

 

ConfesionDeFe2

Photo by Matt Gruber / Copyright free

 

Con cierta frecuencia nos preguntan: “pero ustedes, ¿qué creen?” Con esta pregunta las personas quieren saber cuáles son las diferencias entre nosotros y otras comunidades cristianas. Y también quieren saber sencillamente qué es lo que enseñamos para poder juzgar acerca de nuestra fidelidad a las Sagradas Escrituras, norma absoluta de la fe cristiana.

Por esto nosotros, la Iglesia Cristiana Gracia y Amor de Bogotá, enlazamos esta edición de nuestra declaración de fe. Ojalá sirva para responder las preguntas de arriba y, a la vez, para orientar respecto a las grandes verdades en su conjunto reveladas por Dios para toda persona que quiere vivir y morir dichosamente.

Hay otro motivo para presentar esta edición en este momento. La declaración de fe que presentamos, la que nos orienta en nuestra creencia y conducta, es una declaración que en este año de 1989 cumple 300 años de haber salido a la luz. En el año 1689, en Londres, unas iglesias cristianas la publicaron con el fin de identificarse detalladamente como exponentes de la fe cristiana antigua centrada en la gracia de Dios en el evangelio de Jesucristo y orientada hacia la gloria del Dios trino.

Actualmente muchos de los que se llaman cristianos no comprenden bien qué implica el nombre “cristiano”. Por otro lado, hay cierta aversión a una definición (y enseñanza todavía por las Escrituras) para su obediencia y disfrute de la voluntad perfecta de Dios. Invitamos a toda persona que dice ser cristiana a un estudio cuidadoso de las páginas que siguen y a una comparación de las mismas con la Biblia. Así podríamos saber si somos cristianos o no, y, a la vez, podremos darnos cuenta del acuerdo que hay entre los dos documentos. La declaración de fe es un fiel reflejo de la enseñanza bíblica.

Un fruto derivado del estudio de esta declaración de fe podría ser la unidad mayor las distintas comunidades cristianas. Algunos opinan que la definición de las doctrinas cristianas resulta más bien en la fragmentación del cristianismo, y esta directamente en proporción a lo detallado de la definición. La declaración aquí presentada, sin embargo, dogmatiza en los puntos donde la Biblia misma lo hace. Por eso, su enfoque en la esencia bíblica lleva (si dejamos que nos lleve) a la única unidad que vale y que perdura, la unidad obligada por la voz de Dios. La fragmentación, cuando sucede, se debe a la debilidad o a la desobediencia humana y no a algún supuesto defecto en la revelación divina.

Pero, ¿para qué tanto detalle en la declaración? la declaración da tanto detalle precisamente porque la Biblia, la Palabra de Dios, la da. Y Dios dice lo que dice porque sabe que es para nuestro bien y para su gloria. No saber, no entender, y no practicar, es perder el consejo vivo y perfecto de Dios para la orientación poderosa de la totalidad de nuestra vida como criaturas de Dios en este mundo.

Sí, es cierto, la declaración exige un estudio detenido. Obliga a que pensemos. No podemos llegar a conclusiones precipitadas. Pero ¡qué fruto más delicioso para quienes por ella se entreguen a saturarse de la Palabra de Dios, la Biblia misma! La declaración que presentamos permite un esquema de la verdad de Dios que sistematiza conceptos de otra manera confusos, desconectados, desproporcionados, y en alguna medida inútiles. Esta comprensión nos capacita para ser fuertes y fieles representantes del mensaje de Cristo en medio de un mundo pecador, hundido en la miseria, y decepcionado por las inconsecuencias, los errores, las deformaciones, y la ignorancia de la Iglesia Cristiana en general.

1989

 

Para descargar una copia de nuestra confesión de fe, haga clic en este enlace.

 

ninos6

Photo by Michael Heiss / CC BY

 

Audio2

 

Aquí podrá escuchar conferencias, estudios, y sermones especiales.


 

AMiAmadaFamilia

El pastor y misionero César Triana, nos dirige en esta serie presentando el evangelio. (Foto: Henry Burrows/Flickr)

PalabrasDeConsuelo1

El Señor te bendiga, y permita que si en algo estas cortas reflexiones logran confortarte, seas luego tú quien busques confortar a otros por medio de este breve peregrinar por la tierra, para el bien de la iglesia y para la gloria de nuestro precioso Dios. (Foto: J Swanstrom/Flickr)

HistoriaDeLaMusicaCristiana

 

En esta serie veremos cómo se ha desarrollado la música del pueblo de Dios, desde los tiempos bíblicos hasta nuestros días. Es un recorrido histórico para comprender lo que el pueblo de Dios, y principalmente el pueblo cristiano ha usado para adorar a Dios por medio de la música.

A través de los siglos, es la cultura cristiana la que preservó y desarrolló la música, aún hasta nuestros días. Esto es importante no sólo para que la Iglesia conozca y valore su propia tradición y cultura, sino para explicar tanto el origen de las músicas que se usan en el culto cristiano hasta nuestros días, como para entender el origen mismo de la música en occidente, cuya cultura fue desarrollada por el cristianismo.

Veremos en forma breve y general lo que la Biblia habla sobre la música, cómo fue la música en los primeros siglos del cristianismo, la música en la edad media, la música en la Reforma protestante, el origen de los himnos, la música gospel, su desarrollo en lo que llegó a ser la música cristiana contemporánea en el siglo XX y finalmente lo que es la música cristiana en Latinoamérica. (Foto: Saint-Petersburg.../Flickr)

 

Luther at the Diet of Worms

La confesión bautista de Londres es una de las últimas confesiones de su época, y está basada en las que le precedieron. Un estudio de estas nos ayuda a entender mejor nuestra confesión. Las circunstancias históricas dentro de las cuales se desarrollan las confesiones iluminan su énfasis y su teología. Saber el contexto original ayuda mucho. ¿Quiénes son sus escritores? ¿A qué batallas se enfrentaron? ¿Por qué no se desarrollaron antes? ¿Por qué hoy seguimos utilizando confesiones de hace 400 años? Estas son preguntas interesantes. En esta serie, vamos a buscar respuestas a estas preguntas. (Foto: von Werner/Wikipedia)

Fundamentos

Tertulia Teológica

Esta es una colección del programa radial "Tertulia Teológica", de la Iglesia Bautista Reformada el Redentor, transmitido los lunes a las 8:05 pm, con retransmisión los viernes a las 12 m y los sábados a las 6 pm. (Foto: Lawrence OP/Flickr)

AMiAmadoHermano

El pastor y misionero César Triana, inicialmente movido por el amor hacia un hermano suyo, pero también motivado por el amor hacia los demás, nos presenta una serie de mini mensajes evangelísticos. Si usted aun no cree en Cristo, quiera el Señor utilizar estos audios para llevarlo a las Escrituras, las cuales nos presentan a Jesucristo, El Salvador.

Apocalipsis2

Análisis detallado del libro de Apocalipsis. (Foto: Ed Suominen/Flcikr)

TeologiaSinFronteras

¿Dónde se originan las confesiones? ¿Por qué son importantes? ¿Cuáles características tienen las confesiones bautistas, y cuál relevancia han tenido en la Iglesia? Estas, y otras preguntas, tendrán sus respuestas en el programa radial "Teología sin fronteras". (Foto: J. Mark Bertrand/Flickr)

Sexualidad

El objetivo de estas charlas es entregarle de manera especial a papá, pero también a mamá, herramientas para que guíen a sus hijos en casa. Solo si tenemos familias entregadas al Señor, donde las decisiones se toman a partir de las escrituras, tendremos iglesias santas. La Biblia es nuestra única autoridad en fe y conducta. (Foto: Joe/Flickr)

 Adolescentes1

Última serie de estudios del programa "Escuela para Maestros de Biblia en el Hogar", sobre los adolescentes. (Foto: unionland/flickr)

SemanaSanta1

Colección de sermones realizados durante semana santa. (Foto: John Wright/Flickr)

 

MoldeandoElCaracterDeNuestrosHijos

Esta serie de sermones fueron dados por el pastor Sugel Michelén, hacia el año 1997. Se adicionó un archivo con resumen y preguntas a cada sermón, para facilitar su estudio. (Foto: Kat Grigg/Flickr)

 

Vea aquí el artículo introductorio a esta serie (5 páginas) 

DescargarBoton2


Esta es la lista de personas que en algún momento, por la providencia de Dios, han predicado o dirigido estudios de escuela dominal en la Iglesia Cristiana Gracia y Amor.

IconSchedule5

Información de contacto:
Sede Norte:
carrera 67 # 175-60, Bogotá D.C.,
cel. 311 279 0577, ver más
Sede Alborada:
calle 97 # 68 F - 96, Bogotá D.C.,
613 15 24 - info @ iglesiacristianagraciayamor.org, ver más

 

 
 

IconSchedule3

Horario de los servicios principales:
Escuela dominical Domingo 10:00 a.m. - 10:45 a.m.
Culto principal Domingo 11:00 a.m. - 12:10 p.m.
Estudio Bíblico Domingo 4:00 p.m. - 5:00 p.m.
Reunión de oración (Norte) Miércoles 7:00 p.m. - 8:00 p.m
Reunión de oración (Alborada) Jueves 7:00 p.m. - 8:00 p.m.

IconLinks1

Destinos más populares:

Inicio la página inicial de este portal web
Sermones, colección de los sermones predicados en esta iglesia
Radio, disfrute la programación de la emisora de la iglesia
Estudios de la Palabra de Dios, libres
Artículos evangelísticos y de la vida cristiana en general